design

Publié le 25 Février 2021

En oposición al racionalismo y la primacía del diseño sobre la función social y cultural de la arquitectura, el anti-diseño enfatiza el estudio de las necesidades de los individuos por encima de todas las demás consideraciones. Inspirándose en el Art Nouveau, Art Deco, Pop-art y el arte kitsch, produjeron una serie de diseños irreverentes que cuestionaban la funcionalidad y el buen gusto del diseño anterior. También diseñaron proyectos para ciudades utópicas del futuro, donde la tecnología liberaría a los seres humanos del trabajo manual.

El colectivo de arquitectura de vanguardia italiana Superstudio fue fundado en Florencia en 1966 por Adolfo Natalini y Cristiano Toraldo di Francia.

El proyecto de Superstudio consta de conceptos que se encuentran en la encrucijada de la arquitectura, el diseño, el arte y la antropología. Esta aventura empuja a los socios del movimiento a probar enfoques para reflexionar sobre las formas de habitar el mundo transformado, teniendo en cuenta diferentes criterios y en particular desarrollos técnicos. Este grupo de arquitectos, alimentado por la contracultura y Marx, y la ecología antes de su tiempo, reivindicaba una práctica conceptual e iconoclasta de la arquitectura que intentaba encontrar respuestas a las preguntas existenciales de la urbanización galopante, así como de la emergente sociedad de consumo.

En 1967, Natalini estableció tres categorías de investigación futura: “arquitectura de monumentos”, “arquitectura de imágenes” y “arquitectura tecnomórfica”. Muchos de sus proyectos fueron publicados en la revista Casabella, desde la ficción hasta las secuencias ilustradas o los fotomontajes4. El trabajo de la agencia tuvo un gran impacto en la evolución del Radical Design.

Superstudio nunca construyó nada excepto muebles "voluminosos". Una negativa a producir que el investigador de historia del arte Ross K. Elfline, en el artículo “Superstudio and the“ Refusal to Work ”” (Revista Diseño y Cultura, 8: 1, 2016), propuso vincular el “operaísmo” y el “ rechazo del trabajo ”de Toni Negri.

Natalini escribió en 1971: “... si el diseño es más un incentivo para consumir, entonces debemos rechazar el diseño; si la arquitectura sirve más bien para codificar el modelo burgués de sociedad y propiedad, entonces debemos rechazar la arquitectura; si la arquitectura y el urbanismo son más bien la formalización de las injustas divisiones sociales actuales, entonces debemos rechazar la urbanización y sus ciudades ... hasta que cualquier acto de diseño esté dirigido a satisfacer las necesidades primarias. Para entonces, el diseño debe desaparecer. Podemos vivir sin arquitectura".

Oficialmente, el colectivo se disolvió en 1982. Después de esta experiencia, los dos arquitectos tomaron diferentes opciones de carrera. Se conocieron gracias a exposiciones organizadas como la retrospectiva “Superstudio 50” presentada en el MAXXI de Roma en 2016 y en la Power Art Station de Shanghai en 2018

Voir les commentaires

Rédigé par Last Night in Orient - LNO ©

Publié dans #Superstudio, #architecture, #Design

Repost0