Last Night in Orient

La agroindustria que causa la deforestación promueve la transmisión de virus o bacterias de animales a humanos. Pero al cambiar el modelo de agricultura, podemos protegernos mejor.

Es cierto que aún no sabemos cómo determinar la causa exacta de la actual pandemia de coronavirus. Entre el pangolín, el murciélago o la antología de tesis conspirativas (un día dirigido a un laboratorio estadounidense, el otro chino), uno navega un poco por la vista. Lo que sí sabemos, sin embargo, es que no se trata del destino. Por el contrario, nuestro sistema económico y sus consecuencias para el medio ambiente son en gran parte responsables de la situación actual. Y sin grandes cambios, es probable que se multipliquen desastres similares.

La lógica capitalista de los agronegocios, que está tratando de apoderarse del mercado de alimentos robando tierras y recursos de países más débiles, es peligrosa para la salud pública. Crean las condiciones para una multiplicación de epidemias, incluso pandemias, y no logran producir alimentos sostenibles de calidad. En un artículo en Lava, el biólogo Rob Wallace dijo recientemente, hablando del modelo agrícola capitalista, que "no podría haber un mejor sistema para producir enfermedades mortales". Pero obviamente para los accionistas, el juego vale la pena ya que garantiza ganancias a corto plazo. Además, debe tenerse en cuenta que nuestros sistemas económicos son un gran desperdicio de producción de alimentos.